Tarta casera de piña, arándanos y fresón

Comenzaremos preparando la fruta para la tarta. Para ello cortamos la media piña y eliminamos la corona y piel exterior con la ayuda de un cuchillo afilado, una vez la tengamos pelada, descorazonamos el centro fibroso de la piña y cortamos en rodajas de medio centímetro de grosor. Lavamos los arándanos y escurrimos bien, añadimos al vaso de la batidora y reservamos. Lavamos también las fresas y les quitamos el rabito y añadimos también al vaso de la batidora. Batimos ambas  frutas durante 30 segundos y reservamos. La base de esta receta es tomar como medida el vasito de yogur, lo que facilita mucho el tema de los ingredientes. Precalentamos el horno a 180ºC. Echamos el yogur en un bol y utilizamos el vasito como medida. Batimos  los huevos con el azúcar, y luego añadimos la levadura con la harina tamizada y el aceite. Utilizaremos la batidora eléctrica, batiendo después de cada adición de un nuevo ingrediente. Cuando tengamos una masa homogénea y fina separamos la mitad de la masa y mezclamos con el batido de fresa y arándano, colocamos las rodajas de piña en un molde de tarta debidamente engrasado con aceite de oliva o mantequilla para que no se pegue y volcamos la mitad de la masa que no se ha mezclado con el puré de arándanos y fresas, damos unos golpecitos para que se asiente bien y encima volcamos la masa mezclada con el puré de frutas.  Horneamos durante 30-35 minutos a 180ºC, o hasta que veamos que la punta de un cuchillo sale limpia al pinchar en el centro del bizcocho.

Desmoldamos y dejamos enfriar.